En la estética facial es esencial el equilibrio y naturalidad. La zona facial se divide en 3 partes que deben estar compensadas.
- La frente
- La zona nasal
- Labial-mentón.
Para conseguir o poseer el equilibrio, deben tener el mismo tamaño o distancia entre las 3 zonas. La belleza natural no debe destacar un solo aspecto, sino el conjunto total, el todo del rostro es la belleza.
Hoy en día existen diferentes tendencias en la estética que se pueden resumir en 4 perfiles diferentes, siempre dependiendo del gusto de la persona:
- Aumento exagerado de pómulos y labios.
- Cejas muy levantadas, sobretodo las alas externas de las mismas y labios prominentes hacia afuera los coloquialmente denominados “labios de pato”.
- Caras voluminosas para intentar corregir la flacidez, creando un rostro parecido al de la luna llena.
- El equilibrio y la naturalidad. Las cejas simétricas, pómulos ascendidos, labios equilibrados (sin proyectarse hacia adelante) y ángulo maxilar definido.
Para un médico estético, el resultado ideal es la 4ª opción. Es el resultado que lleva al rostro tener el equilibrio en estética y naturalidad.
En la estética facial, hay que intentar aplicar o inyectar productos naturales siempre—nunca permanentes. Además, es bueno estimular con vitaminas, la piel de la zona orgánica de la dermis para prevenir el envejecimiento cutáneo. Pues todo tratamiento que se realice, se debe ver el resultado inmediato, pero siempre pensando en el futuro.
Para conseguir una mejor elasticidad en la piel o prevenir la flacidez siempre hay aspectos favorables para conseguirlo, como es el ejercicio y la alimentación —que en anteriores posts hemos podido hablar de ello.
Pero si aún así las arrugas persisten, pues la genética es un activo muy fuerte en nuestro proceso de envejecimiento, pueden realizarse el tratamiento antiarrugas que mejor les convenga. Además, son tratamientos sin cirugía.